miércoles, 22 de abril de 2009

¡CUMPLÍ OCHO AÑOS DE MAMÁ! (por María)

El otro día leímos con Vero este comentario que había escrito una amiga nuestra y nos pareció una frase sumamente acertada.
Nadie nace siendo madre ni padre, y aunque lo fantasees o lo proyectes en realidad no tenés mucha idea de qué se trata.
Uno empieza a ser mamá en ese momento tan maravilloso en que te colocan a tu hijo entre tus brazos. Ese momento inolvidable, único, en que por primera vez te conocés con tu hijo, en el que por primera vez se conectan las miradas. Donde empezás a descubrir sus olores, sus texturas. Un momento de éxtasis total.
Pero luego, volvés a la realidad, y ese ser humano que tanto ansiabas no es sólo un cachorrito que colocaron entre tus brazos y que se va a quedar ahí mirándote.
Esa personita empieza a interactuar y ahí te das cuenta que no tenés ni idea de lo que te está pidiendo.
Uno empieza a probar... Tendrá hambre... Tendrá sueño... Le dolerá la panza... Y tantas otras cosas que se nos cruzan por la cabeza.
Es que uno aprende a ser mamá con ellos. Hay cosas que salen bien por instinto o por sentido común, pero hay situaciones en donde nos sentimos absolutamente desorientadas.
Y yo me quedé pensando en esta frase: “Cumplí ocho años de ser mamá”.
Yo la miro a Guada de ocho años y la veo super chiquita, veo cuánto ha crecido, pero también sé todo lo que le falta por crecer, por aprender, por experimentar.
Entonces pienso que yo también soy una mamá chiquita (apenas tengo ocho años), que a mí también me falta mucho por aprender y experimentar.
Será por eso que muchas veces me confundo en la enseñanza de mis chicos, que muchas veces no sé qué es lo correcto y miro hacia el futuro y me doy cuenta que seguramente habrá situaciones que no voy a saber cómo resolver.
Seguramente el hijo mayor será el que más sufra nuestro aprendizaje, y que a los que vienen luego se les haga algo más llevadero.
Será cuestión de seguir creciendo, de seguir probando, de tomar las cosas buenas que vamos haciendo y de intentar modificar las malas. No nos olvidemos que estamos aprendiendo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario